jueves, 19 de abril de 2012

PROSPECTIVA DE FILOSOFÍA PARA NIÑOS


Eugenio Echeverría

Breve reseña histórica: de Estados Unidos al mundo.
Filosofía para niños surge a finales de los años sesenta con Mathew Lipman. Sus alumnos de filosofía en la Universidad de Columbia, en Nueva York, usaban argumentos deficientes para defender sus ideas, hacían generalizaciones inadecuadas y en términos generales, sus habilidades de razonamiento podrían ser mucho mejores de lo que eran. Es allí donde surge la idea de llevar la filosofía, la disciplina del pensamiento, a niveles educativos previos al de la universidad, para que los estudiantes adquirieran las herramientas del buen pensar desde una edad temprana.
Funda el Instituto para el Desarrollo de Filosofía para Niños (IAPC) en la Universidad de Monclair, New Jersey y comienza la creación y desarrollo de los materiales que ahora conocemos, novelas y manuales para el maestro de filosofía para niños. En 1973 queda oficialmente reconocido el instituto como parte de la Universidad de Montclair.
A partir de los ochenta empieza un desarrollo enorme de filosofía para niños en el resto del mundo. En Nueva Jersey se ofrecen talleres internacionales en mayo, agosto y enero. Debido a la gran demanda hay una temporada en a que se ofrecen talleres cuatro veces al año. Estos solían durar hasta veinte días y se llevaban a cabo principalmente en Mendham, New Jersey. Originalmente una escuela para señoritas dirigida por monjas Inglesas, la ahora casa de retiro de Mendham está todavía dirigida por monjas inglesas en medio de una zona boscosa de New jersey.
Otras fechas importantes para filosofía para niños son la de la fundación del ICPIC en 1985 en Dinamarca y la de la creación del video “Sócrates para Niños de seis Años” por parte de la BBC de Londres.
La creación del ICPIC respondía ya a la necesidad de un organismo internacional donde se compartieran los logros de filosofía para niños, los problemas encontrados, los diversos contextos y poblaciones donde se estaba implementando, la investigación con filosofía para niños y otras áreas del desarrollo del niño y adolescente y también la traducción, adaptación y mas recientemente la creación de materiales para trabajar los objetivos de esta propuesta pedagógica en diversos contextos socio culturales, geográficos y educativos. 
El caso de México.
Filosofía para Niños se conoce en México en 1979 con la llegada de Albert Thompson. Un profesor de la universidad de Marquette, en Milwaukee, Wisconsin de donde venia como profesor invitado por un año a la Universidad Anáhuac en la ciudad de México en la carrera de Administración Educativa. Allí habla con sus estudiantes de filosofía para niños y es donde comienza a desarrollarse el interés por explorar esta propuesta pedagógica más a fondo por algunos de ellos.
Posteriormente profesores de la universidad son enviados a algunos de los talleres ofrecidos en New Jersey y se continúa diseminando la idea. La Universidad Iberoamericana hace una primera traducción de la prueba de Razonamiento de Nueva Jersey y se conduce investigación en conjunto con personas de la SEP en algunas escuelas de la capital. Comienzan a asistir a algunos de los talleres de Nueva Jersey profesores de la universidad Iberoamericana. El entonces director académico de la Ibero, Armando Rugarcía se interesa mucho por el proyecto y le da un apoyo fuerte inclusive ya como rector de la Ibero de Puebla. También invitan a Mathew Lipman y Ann Sharp para dar un taller de Filosofía para Niños en México. Traducen y publican los primeros materiales que se manejan en México con el programa. En esta empresa se involucran fuertemente desde entonces Teresa de la Garza en Filosofía y también personal del departamento de didáctica de la universidad.
El gran interés por filosofía para niños durante la década de los ochentas en la universidad Anáhuac y la Iberoamericana hacen posible que se realice una reunión del ICPIC (Consejo Internacional de Filosofía para Niños) en la Ibero, donde asisten personas de varios países, entre ellas Catherine Young Silva, de Brasil, que desde entonces impulsaba la necesidad de filosofía para niños como una herramienta fuerte para el logro de la concientización hacia el cuidado del ambiente y el desarrollo sustentable. También durante los noventa la apertura de un doctorado internacional en filosofía para niños. A este asisten estudiantes de diversos países y el profesorado también consiste de profesores internacionales expertos en el área de estudio relacionada con filosofía para niños. Después de dos generaciones, el apoyo por parte de la universidad disminuye y el doctorado se cierra. En la Ibero de Puebla se abre un diplomado en filosofía para niños donde muchos maestros del estado conocen el programa y lo aplican en sus escuelas.
Mientras todo esto sucede ya se empieza a aplicar en algunas escuelas particulares de la ciudad de México y posteriormente en Puebla, y el interés y conocimiento del programa siguen creciendo en el país.
El ITESO en Guadalajara a través de algunos de sus catedráticos va desarrollando un interés por filosofía para niños y también se van personas de allí a los talleres de Nueva Jersey. A raíz de este interés creciente, en 1989 se funda el centro de Filosofía para Niños de Guadalajara que dirige actualmente Mónica Velasco. Las funciones de un centro son principalmente tres:
  1. Formación de docentes
  2. Traducción, adaptación y creación de materiales
  3. Investigación
En 1992 se funda en San Cristóbal de las Casas el CELAFIN (Centro Latinoamericano de Filosofía para Niños, A.C.), y en lo que constituye otra fecha importante para el desarrollo de filosofía para niños en el país, en 1993 también en San Cristóbal de las Casas se funda la Federación Nacional de Filosofía para Niños. La Federación es reconocida unos años después por Mathew Lipman y Ann M. Sharp como la instancia en el país que reconocida y avalada por el IAPC para aprobar la formación de centros de filosofía para niños y para sentar los lineamientos de los requisitos para convertirse en formador de docentes en el programa.
El programa de formación de docentes de México, por su estructura y organización, es reconocido como uno de los que tienen más calidad e integridad en el mundo. Es un producto de años de reflexión por parte de los formadores de docentes del país y por discusiones basadas en los productos de la experiencia, los problemas encontrados y las adaptaciones pertinentes para la realidad mexicana que con el programa se van gestando en diversos contextos del país. También ha sido reconocido como uno de los más completos durante las reuniones internacionales del ICPIC, en donde la formación de docentes es un tema de discusión obligado.
¿Cuánto debe saber y sobre qué disciplinas un formador de docentes y cuánto y sobre qué debe saber un maestro frente a grupo trabajando con sus niños o adolescentes? Son dos de las preguntas centrales en este rubro. 
Su diseminación en las escuelas y la importancia de su implementación en las escuelas públicas.
A principios de la década de los ochenta, filosofía para niños empieza a trabajarse mayoritariamente en escuelas particulares y a través de su diseminación en diversas partes de la República la historia es similar. Ha sido hasta los últimos diez años aproximadamente que dada la extensión del conocimiento sobre filosofía para niños en diversos ámbitos educativos, personas en el sector de la educación pública han promovido la inserción de esta propuesta dentro de sus planteles. Desgraciadamente estos intentos a veces duran mientras el funcionario cuenta con los vientos políticos propicios. Cuando estos cambian, llega alguien nuevo y a veces se deshace de lo que su antecesor hizo para introducir propuestas que beneficien a sus gustos personales o a sus allegados cercanos.
En Baja California Sur hubo la intención de implementarlo a nivel estatal. El secretario de educación en turno tenía la mejor disposición y la convicción de que era algo que valía la pena. Se comenzó a formar a profesores de los diversos niveles educativos, especialmente en La Paz, y a los tres años ganó como gobernador alguien opuesto al partido del secretario de educación que había promovido el programa. Este apoyo dejo de prestarse.
En Tabasco existe apoyo del secretario de educación para este tipo de propuestas por lo que el diplomado en filosofía para niños ya es reconocido como una de las intervenciones educativas que benefician con puntos dentro de su carrera a los maestros que lo cursan.
Además, la escuela Normal Urbana de Balancán, también en Tabasco, lleva tres generaciones de estudiantes que salen habiendo cursado el diplomado en filosofía para niños. Muchos de esos maestros están trabajando en escuelas rurales públicas del estado y algunos de ellos siguen implementando con entusiasmo filosofía para niños en sus salones de clase.
Hay otros ejemplos similares pero sin duda el más impresionante por su compromiso, su estructura y su continuidad es el esfuerzo del SEIEM en el Estado de México. Casi diez años de ir desarrollando una estructura organizativa con niveles de intervención, mecanismos de evaluación formación continua, actualización y seguimiento de los docentes involucrados son solo algunas de las cosas que hacen de este esfuerzo un parte aguas en lo que respecta a la diseminación de filosofía para niños a nivel del sector de educación pública y, ojalá, un ejemplo a seguir en otros estados de la República donde vaya apareciendo la preocupación genuina por proporcionar a los niños y adolescentes una oportunidad para desarrollar un pensamiento crítico, analítico y reflexivo. Darles las herramientas que en esta sociedad que les ha tocado vivir y a donde se la van a tener que “rifar” allá afuera son indispensables para salir adelante con mejores probabilidades de éxito. Especialmente en sectores donde los estudiantes no tienen los recursos para pagar escuelas particulares que se destacan por implementar programas vanguardistas como filosofía para niños. Creemos y siempre hemos insistido en ello, que la oportunidad para el desarrollo de habilidades de razonamiento y para desarrollar la dimensión filosófica de sus vidas no debe ser un privilegio de unos cuantos sino un derecho de todo niño y adolescente en nuestro país. 
Trabajo con poblaciones indígenas y desarrollo de materiales para las mismas.
El diez por ciento de la población del país es población indígena. También es la población más desfavorecida y pobre del país. Las asimetrías e inequidades, discriminación y explotación de las que han sido objeto los pueblos indígenas durante cientos de años fueron expuestas de manera patente con el levantamiento zapatista de 1994. Aunque se han creado más escuelas, hospitales, carreteras, el rezago educativo de la población indígena llevará generaciones para ser superado. Los maestros que enseñan en las comunidades indígenas tienen una formación deficiente y en muchos casos no hablan la lengua de los niños con los que tienen que trabajar.
Las políticas para la asimilación al país de los pueblos indios pretendían occidentalizarlos, que aprendieran español y que finalmente fueran verdaderos “ciudadanos mexicanos”. Es hasta principios del siglo XXI que se crea la CGEIB (Coordinación General de Educación Intercultural Bilingüe) y con ella la intención de revalorar la cultura indígena, las lenguas y las tradiciones y promover políticas educativas que vayan aboliendo las asimetrías del sistema.
La comunidad de diálogo y filosofía para niños desempeñan aquí un papel bien importante. Como espacio para la discusión de conceptos como cultura, identidad, tradición, discriminación, autonomía, etc., pueden ir ayudando a los niños y adolescentes indígenas a entender sus circunstancias y a tener los elementos para decidir libremente los caminos por los que quieren llevar sus vidas.
Para este propósito se han publicado ya materiales especialmente dirigidos para ser trabajados con población indígena. Maestros indígenas y también estudiantes han colaborado para la creación de estos materiales. Esto se ha hecho en parte desde la Maestría en Psicopedagogía de la UNACH (Universidad Autónoma de Chiapas) y también a través del CELAFIN y con la colaboración de estudiantes de la Ibero México como parte de su servicio social. 
El papel de la familia y el enlace familia escuela
Como mencioné anteriormente, en México se la reflexión acerca de la formación de docentes ha tenido un espacio privilegiado; sin embargo, a través de la experiencia trabajando con escuelas en todo el país, nos hemos dado cuenta de la importancia que tienen los padres de familia para la obtención de los objetivos de filosofía para niños y para facilitar el trabajo de las escuelas y los maestros que lo están implementando.
Filosofía para niños tiene una visión de lo que es el niño, lo que es la escuela y también tiene una visión de una sociedad “deseada”. Es por esto que la comunidad de diálogo promueve una serie de valores que no son neutrales; son valores democráticos de libertad, respeto e igualdad. Un ambiente autoritario en un salón de clase no es congruente con el ambiente que debe prevalecer en una comunidad de diálogo. Es por esto que el maestro “tradicional”, que tiene las respuestas, que lo sabe todo y que enseña a sus alumnos a obedecer, no tiene cabida dentro de un contexto donde se quiere promover el pensamiento reflexivo, crítico y la razonabilidad. Nos ha ido quedando claro que para algunos maestros va a ser muy difícil cambiar hábitos aprendidos desde hace muchos años o transformar una forma de enseñanza basada en una autoridad incuestionable. Esos maestros no son invitados a trabajar en la comunidad de diálogo filosófico. Pero que pasa con los niños que después de sus clases de filosofía, donde se les permite opinar, se respetan sus ideas, se les enseña a preguntar y a pedir y dar razones, llegan a una casa con una familia autoritaria en donde obedecer y “no contestar” es lo que prevalece. Esos niños pueden tener problemas pues ven que en la escuela se les dice una cosa y en su casa no les permiten cuestionar o pedir razones. Es por esto que necesitamos enlistar el apoyo de los padres, llevarles la información necesaria acerca de lo que estamos haciendo y explicarles las consecuencias de practicar un estilo parental o práctica de crianza determinado con sus hijos.
Una de las estrategas que usan algunas de las escuelas que llevan filosofía para niños en el país es la organización de conferencias para padres, en donde se les habla de lo que se hace en filosofía para niños, de las herramientas importantes que sus hijos están adquiriendo allí, y de cómo para un mundo globalizado en cuanto a la información y la comunicación estas herramientas se vuelven indispensables. No ya que sepan muchos datos sino que adquieran herramientas, estrategias y procesos de pensamiento que los equipen para saber, frente a un problema determinado, qué datos necesitan, dónde pueden obtenerlos y cómo pueden procesarlos para resolver un problema en circunstancias específicas.
Después de la conferencia los padres pueden hacer las preguntas que tengan para resolver sus dudas y el maestro puede hacer lo posible para enlistar el apoyo de los padres y darle continuidad al trabajo que se hace en la escuela. Sin embargo para que el maestro pueda hacer esto tiene también que estar familiarizado con los estilos parentales para poder explicar de manera sencilla y clara a los papás de sus alumnos las implicaciones de cada uno de ellos. Con el advenimiento de la teoría de sistemas en psicología, que ve a la familia como un sistema equilibrado donde sus miembros contribuyen a mantener ese equilibrio o a perturbarlo, han surgido clasificaciones complejas sobre tipos de familia.
Por esto pienso que dentro de la formación de los docentes en filosofía para niños podríamos incluir, en México un apartado para este tema. No algo demasiado complejo como la teoría de sistemas, sino algo como los tres estilos parentales de los que se habla ya en la literatura psicológica desde hace ya muchos años.
El estilo parental autoritario no permite el cuestionamiento, el diálogo, establece reglas fijas, claras e inflexibles, se hace lo que dicen los padres (por lo general el padre) y los niños tienen que obedecer. Como podrá notarse este estilo parental choca con un esquema de interacción social dentro de una comunidad de diálogo filosófico. No se trata de juzgar el modo en que los padres tratan a sus hijos sino de informarles lo que probablemente sucede con sus hijos cuando los tratan de ciertas formas.
El niño en un hogar autoritario va a tener problemas tomando decisiones propias, le va a ser difícil responsabilizarse de sus acciones pues siempre hace lo que le dicen y por lo tanto si se algo sale mal pede decir “es que tú me dijiste que lo hiciera de ese modo”.
El estilo incongruente indiferente se refiere al contexto familiar donde los padres no tienen un verdadero interés en lo que le pasa al niño, o donde hay inestabilidad familiar, sólo uno de los padres está presente o es una familia disfuncional, donde las reglas no son claras, a veces se permiten ciertas cosas y otras no y lo que la define es que es impredecible. Esto crea mucha inseguridad en el niño y en este caso la comunidad de diálogo sirve como un espacio estable donde se siente seguro y respetado y donde sus opciones cuentan y son escuchadas.
Finamente la familia autoritativo democrática es aquella que es muy congruente con lo que hacemos en la comunidad de diálogo, se escucha a los hijos, se les toma en cuenta para la toma de decisiones que afectan a la familia y se da el diálogo razonado para la solución de conflictos. Hay reglas claras en la familia pero también son flexibles.
En México todavía hay familias en donde se hace lo que dice el padre sin cuestionar, los niños no cuentan porque no piensan y todo mundo tiene que obedecer y callarse. Creo que con filosofía para niños podemos ir cambiando este estado de cosas pero no podemos evadir la responsabilidad que tenemos de tratar con los padres de familia para propiciar estos cambios. Esto puede parecer controversial para algunos pero creo que la responsabilidad de la escuela va más allá de lo que sucede en el salón de clase durante el horario escolar y si queremos que nuestros niños y adolescentes se acerquen a los objetivos de filosofía para niños tenemos que reconocer esta responsabilidad y enfrentarla de la mejor manera. 
CONACULTA y UNESCO su interés en FpN.
Filosofía para niños en México ha recibido atención de diversas instancias en diferentes momentos a través del tiempo. Algunas de estas han mantenido su interés y para otras ha sido algo pasajero.
CONACULTA tiene un programa llamado Alas y Raíces a los Niños, que promueve el protagonismo infantil en la cultura y las artes y que tiene representantes en cada estado de la República. Hace unos años se me pidió una conferencia en Mérida para Alas y Raíces. Estaban los representantes de todos los Estados y la mayoría mostró un interés en explorar más a fondo nuestro trabajo con el programa. A raíz de este encuentro se planteó con Angélica de Icaza la creación de un libro sobre el pensamiento y el arte de los niños. Es muy probable que este año pueda salir a la luz ese libro.
Trabajamos comunidades de diálogo con niños el DF y de Cuernavaca y se seleccionaron parte de los diálogos de estos niños acerca de los temas de la libertad, el pensamiento, los secretos y otros más. Posteriormente un tallerista de CONACULTA fue a trabajar con los niños para que hicieran dibujos referentes a los temas que se discutieron en las comunidades de diálogo. El libro será una manifestación de las ideas de los niños sobre estos temas y lo que escribieron acerca de ellas y la representación artística de su visión acerca de estas ideas.
La UNESCO ha tenido una presencia importante en el país desde hace muchos años y algunos de los objetivos más importantes de esta organización internacional son muy congruentes con los objetivos de lo que hacemos en filosofía para niños. Desarrollo sustentable, conservación del ambiente, globalización, entendimiento intercultural, educación para la paz y los derechos humanos, educación para la democracia; son algunos de ellos. Ha escuelas en México afiliadas a la UNESCO promoviendo actividades relacionadas con estas metas y algunas de ellas también han adoptado filosofía para niños como una propuesta pedagógica muy congruente con estas metas y la comunidad de diálogo como un espacio educativo idóneo para reflexionar y crear compromisos de acción en este sentido.
La conferencia internacional de ICPIC a celebrarse en Jerusalén en junio aborda temáticas de fundamental importancia para los problemas más acuciantes y actuales que estamos enfrentando en la actualidad. El entendimiento intercultural, la identidad, la tolerancia, etc. son solo algunos de ellos.
Cada vez mas la enseñanza de la filosofía para promover actitudes democráticas y la comunidad de diálogo filosófico como un espacio privilegiado para esto se desarrollan alrededor del mundo. Por primera vez en noviembre del año pasado en el día internacional para la enseñanza de la filosofía promovido por la UNESCO, en París, filosofía para niños tuvo un reconocimiento y una representación importante de diferentes países, incluido por supuesto México. 
¿Qué sigue para México?
Seguir promoviendo esta propuesta que se convierte para los que estamos convencidos de ella en una forma de vida, seguir viendo las formas y estrategias de las que podemos echar mano para que esto llegue cada vez mas y mas a los espacios de la educación pública y a las poblaciones de niños y adolescentes menos favorecidos.
También importante es apoyar a la Federación Mexicana de Filosofía para Niños para la consolidación de las tareas que la nueva mesa directiva se ha planteado y que darán todavía más solidez a la propuesta de filosofía para niños en el país, propiciando su desarrollo con la calidad e integridad que han puesto hasta ahora a México en el mundo como uno de los países en los que “saben lo que están haciendo y podemos aprender de ellos” en filosofía para niños.

No hay comentarios:

Publicar un comentario